En los últimos años, los scooters eléctricos han ganado popularidad en diversas ciudades de México como una alternativa de movilidad práctica y sostenible. Su facilidad de uso, bajo costo operativo y menor impacto ambiental han impulsado su adopción, especialmente entre jóvenes y profesionales que buscan opciones de transporte más ágiles.
Sin embargo, su expansión también ha generado debates sobre regulación, seguridad y viabilidad en la infraestructura urbana.
¿Son realmente una solución viable para la movilidad urbana o representan un nuevo desafío para las ciudades mexicanas? El tiempo lo dirá, pero este artículo podrá darte una pista más rápida.
Una tendencia en aumento
El uso de scooters eléctricos en México ha experimentado un crecimiento significativo, especialmente en zonas metropolitanas como Ciudad de México, Monterrey y Querétaro. Según datos recientes, la tendencia ha ido en paralelo con el aumento del uso de motocicletas, lo que sugiere una preferencia creciente por medios de transporte individuales, ágiles y económicos.
Uno de los factores clave detrás de esta expansión es la necesidad de soluciones de movilidad más eficientes en ciudades congestionadas. La facilidad de adquisición, el bajo mantenimiento y la posibilidad de evitar el tráfico han convertido a los scooters eléctricos en una opción atractiva para personas que buscan una alternativa de transporte sin depender del automóvil.
Además, su adopción no se limita solo a hombres jóvenes. Se ha registrado un aumento en el uso de scooters eléctricos entre mujeres y trabajadores que buscan optimizar sus traslados diarios sin recurrir al transporte público o al automóvil propio.
Aun así, el crecimiento de esta tendencia no ha estado exento de problemas. A medida que más personas utilizan scooters en las calles, se han hecho evidentes desafíos en términos de seguridad, normativas y convivencia con otros medios de transporte.
Regulaciones y desafíos para la movilidad en ciudades
Si bien los scooters eléctricos han demostrado ser una alternativa viable para la movilidad urbana, su uso descontrolado ha generado conflictos en varias ciudades. Algunos de los principales desafíos incluyen:
- Falta de infraestructura adecuada: La mayoría de las ciudades mexicanas no cuentan con ciclovías o carriles exclusivos para scooters, lo que obliga a los usuarios a circular entre automóviles, bicicletas y peatones. Esto incrementa el riesgo de accidentes y dificulta la convivencia vial.
- Regulación insuficiente: Aunque algunas ciudades han implementado normativas para el uso de scooters, todavía existe un vacío legal en muchas regiones. En Monterrey y Querétaro, por ejemplo, se han realizado esfuerzos para regular su uso, pero la aplicación de estas reglas sigue siendo un reto.
- Seguridad de los usuarios: La falta de educación vial y el desconocimiento de las normativas hacen que muchos conductores de scooters circulen sin casco, a altas velocidades o en zonas de alto riesgo. Además, la convivencia con automóviles y peatones genera conflictos y aumenta la probabilidad de accidentes.
- Uso compartido vs. propiedad privada: Mientras que algunas empresas ofrecen scooters en modelos de renta compartida, muchos usuarios han optado por comprar su propio vehículo. Esto plantea un nuevo desafío para la regulación y la convivencia en las ciudades, ya que cada usuario tiene diferentes niveles de experiencia y conocimiento sobre su uso seguro.
A pesar de estos retos, los scooters eléctricos continúan siendo una opción atractiva de movilidad. Sin embargo, su éxito dependerá de la capacidad de las ciudades para adaptar su infraestructura y desarrollar regulaciones claras que prioricen la seguridad de los usuarios.
Opciones de movilidad cómoda y sostenible: más allá de los scooters
Si bien los scooters eléctricos han demostrado ser una alternativa para la movilidad urbana, no siempre son la opción más cómoda o segura para todos los usuarios. Factores como la falta de infraestructura, el clima o la distancia a recorrer pueden hacer que esta opción no sea viable para ciertos trayectos.
Para aquellos que buscan una solución de transporte más segura y confiable, Senda Citi ofrece una alternativa eficiente a través de su servicio de transporte privado. Con unidades diseñadas para garantizar traslados seguros, confortables y puntuales, Senda Citi representa una opción ideal para empresas y escuelas que desean optimizar la movilidad de sus empleados y estudiantes.
Entre las ventajas de optar por un servicio de transporte privado en lugar de un scooter eléctrico se encuentran:
- Mayor seguridad: Conductores capacitados y unidades con estrictos protocolos de mantenimiento.
- Confort y conveniencia: Espacios cómodos y protegidos contra las inclemencias del clima.
- Eficiencia operativa: Optimización de rutas para reducir tiempos de traslado y mejorar la puntualidad.
- Reducción del estrés: Evita la preocupación por estacionamiento, seguridad vial y condiciones del tráfico.
Los scooters eléctricos representan una solución de movilidad innovadora y sostenible, pero su implementación en México aún enfrenta desafíos en términos de regulación y seguridad. Mientras más personas buscan alternativas de transporte, las ciudades deben adaptarse con infraestructura adecuada y normativas claras para garantizar un uso seguro y eficiente.
Para quienes buscan una movilidad confiable, segura y sin complicaciones, Senda Citi ofrece una alternativa integral con beneficios tanto para usuarios individuales como para empresas y escuelas.
En un entorno urbano en constante evolución, elegir la mejor opción de transporte puede marcar la diferencia entre un traslado eficiente y un reto diario en la ciudad.

Staff Senda Citi
Equipo de comunicación Senda Citi